El verano…poder pasear por el campo y encontrar zarzas llenitas de moras…es una maravilla
Y si nos fijamos más…
mmm…hay que controlarse si no…habrán más en el estómago que en la bolsa…
Y despues…a pensar qué hacer con ellas
Unas cuantas directamente al congelador…este invierno…habrá moras 😉
Y con las otras…una deliciosa tarta de queso y moras.
Y ahí va la receta:
(sale una tarta grande o dos más pequeñas)
Para la base:
200gr de galletas tipo María
100gr de mantequilla derretida
una tacita de moras
Para el relleno:
(la receta de este relleno no es mía, la saqué de una página web, pero me olvidé de apuntar cual)
900gr queso tipo philadelphia (esta vez la hice con queso de untar marca Alcampo)
200ml nata para montar
225gr de azúcar
3 huevos
45gr de harina
1 cucharada de vainilla (yo…chorrito de aroma de vainilla)
Para la cobertura:
200gr de moras
150gr de azúcar glass
Preparación:
Primero de todo encender el horno a 180 ºC para que se vaya calentando.
A continuación haremos la base:
– Trituraremos las galletas, a mi me gusta que no queden trituradas del todo. Hay gente que le gusta tritrarlas hasta que convertirlo en galleta picada…cada uno a su gusto.
Añadiremos la mantequilla derretida
Añadiremos las moras desmenuzadas
Mezclamos
Ponemos la mezcla en el molde (id apretando para que la masa quede firme, yo utilizo una cuchara de sopa) y a la nevera
Mientras tanto iremos haciendo el relleno:
– mezclamos el queso con el azúcar hasta que todo este bien mezclado
– Añadimos la nata y la vainilla y seguimos mezclando
– Ahora toca los huevos de uno en uno sin llegar a mezclarlos del todo (así lo ponía la receta original, no se porque, pero haciendolo así sale una tarta deliciosa)
– Añadimos la harina y mezclamos hasta que todo esté completamente integrado.
– Ponemos en el molde sobre las galletas
– Horneamos 10min a 180ºC, despues bajaos a 150ºC y horneamos 30min más. Dependiendo del tamaño del molde (más alto o largo o ancho…) habrá que añadir unos minutos más o no. La textura ha de quedar un poco más espesa que un flan.
– Una vez frío guardamos en la nevera.
Y ahora toca a la cobertura:
– Muy fácil: moras y azúcar al fuego lento hasta que parezca casi confitura
– Vertemos sobre la mezcla anterior y…servir.
Si dejamos enfriar veremos que la cobertura coge la consistencia casi de gelatina.
Por cierto, de un día para otro sigue estando buenísima!!!!
Mmm…hay que intentarla, o no? 😉
Por cierto, a este angelito le encantó 😉